Muy recomendable parar en esta ciudad, es pequeña y se visita pronto. Lo mejor es irse directo a un parking que esté lo más céntrico posible y, desde ahí, visitar la plaza de España y después subir por la plaza de la Virgen Blanca hacia el casco antiguo.
El casco antiguo tiene forma de almendra, con tres calles paralelas a cada lado. Las calles están a diferentes alturas por lo que, en algunos sitios hay escaleras mecánicas para subir de unas a otras lo que es una curiosidad. Callejear por las calles hasta salir a la catedral y a la plaza que tiene delante
La catedral está actualmente siendo restaurada porque se estaba inclinando. Es muy muy interesante la visita porque te ponen un casco y te enseñan las obras de reconstrucción, no dura mucho, solo una hora, pero, de hacerla hay que reservarla previamente en la página web http://www.catedralvitoria.eus/visitas_reservas.php
Para comer hay muchos bares aunque la calle donde más bares hay es la calle cuchilleria (desde la plaza de la Virgen Blanca subir las escaleras que van hacia la virgen y luego tirar hacia la derecha). Allí destaca el bar El Siete en la calle Cuchillería, que tiene un menú muy bueno pero siempre hay bastante cola por lo que conviene ir temprano. También se puede tapear de pinchos. En cualquier caso, toda esa calle está llena de bares donde comer y de copas.
En Euskadi la cerveza corta o caña se llama “zurito”.
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